Este tipo de préstamos se emplean generalmente para comprar una propiedad o para obtener liquidez sobre un bien inmueble que ya se encuentra en su posesión.
Aspectos clave para tener en cuenta al examinar diferentes hipotecas:
- Monto del préstamo: Corresponde al total de dinero que el banco está dispuesto a prestar.
- Tasa de interés y puntos: Son los gastos que se abonan para reducir la tasa de interés.
- Gastos de cierre: Se refieren a los costes finales que cobra la entidad al formalizar el préstamo.
- Tasa Anual Equivalente (TAE): Es el coste total del préstamo, que incluye intereses y otros gastos, expresado anualmente.
- Tipo de interés: Puede ser fijo, manteniéndose constante a lo largo del préstamo, o variable, ajustándose con el tiempo.
- Duración del préstamo: Tiempo concedido para la devolución del préstamo.
- Características de riesgo: Se refieren a penalizaciones por pagos adelantados, pagos imprevistos, opciones de solo intereses o amortización negativa.
Escoja una hipoteca que se ajuste a su capacidad de pago, no únicamente por la que sea elegible
Los bancos le informarán del máximo que pueden concederle, pero esto no siempre refleja lo que usted puede pagar mensualmente sin comprometer su equilibrio económico. Es importante revisar sus ingresos y gastos tanto personales como familiares para definir qué pago mensual es adecuada a su capacidad económica sin sobrecargarlo.
No pase por alto otros costes al establecer su cuota hipotecaria ideal
Gastos como el seguro del hogar, impuestos sobre la propiedad y seguro hipotecario privado se suelen sumar al pago mensual. Para una cálculo exacto de cuánto puede pagar cada mes, hable con un asesor financiero y su agente de seguros, y considere estos montos al establecer el rango de aquí precio adecuado para su nueva vivienda.
Este enfoque le ayudará a hacer una elección informada y segura sobre su próxima hipoteca, garantizando que se ajuste tanto a sus necesidades actuales como a sus posibilidades económicas."